miércoles, 25 de enero de 2012

Marionetas, llenas de ataduras.

Este país, lugar de alegría, ocio, jarana, sol, playas ,grandes juegas todas las noches, consumismo desenfrenado y continuo disfrute durante tantos años, no solo para nosotros, sino para la mayoría de los turistas extranjeros, que veían aquí, su oasis de consumismo, libertad, desenfreno y descontrol.


Todo, lo hemos tratado siempre con esa mentalidad. Aquí, las justicia, es injusta, como las sentencias judiciales, de risa, Marta del Castillo, Juez Garzón, etarras que salen a los pocos años, maltratadores con fianzas y a la calle, y un largo etcétera, del que no hay tiempo para extenderse, verdad. Así funciona, dos días de prensa y de noticias diciendo, "pero como puede ser, pero como puede ser...", pero al tercer día, ni solución, ni recordatorio.
La educación de este país, es de risa, nuestra cultura es una broma anacrónica, de la que muchas mentes cuadriculadas, aún creen, a pies juntillas.

Todos sabemos , en teoría, la mayoría de esta sociedad, aprendió a sumar, leer, escribir, historia, lengua, algo de ciencias, etc...; pero ahora, lo que más sabemos hacer es perder tiempo, chatear, ver programas absurdos, vulgares y de una falta de educación irritante en la caja tonta, jugar a la Play, etc. . Donde están los aprendizajes, de verdad, como llevar una economía familiar para poder ser solvente y dar un futuro a tu familia, como funciona un crédito hipotecario, como hacer una declaración de hacienda, como desgravarte y beneficiarte de tu inteligencia como individuo, donde están las enseñanzas útiles, reales, del día a día, las que de verdad necesitas, no existen, tienes que recurrir a ellos, a su sistema, o informarte de lo que tu perspicacia te permita, pero no saberlo aprenderlo con certeza o perder mucho tiempo en grandes y costosas carreras, para especializarte, pero solo en un tema, no hay una educación social desde el inicio, que cubra todas las necesidades futuras, para cuando uno sea un adulto con múltiples responsabilidades. Porque no les interesa, que el rebaño que tienen en el cercado, sepa demasiado, no vaya a ser que aprendan a romper el candado que les tiene, donde ellos quieren.

Un país, donde todo se explica con un "bueno si no puedo hoy lo haré, mañana o pasado o que se quede sin hacer que ya vendrá otro que lo hará por mi, que mi cafecito es lo primero", donde la responsabilidad, el amor y sobretodo el respeto, ya sea en tu ámbito familiar, como esos seres cobardes que desprecian, maltratan y asesinan a quienes les rodean ("cadena perpetua YA") o ya sea con el resto de la sociedad, seguimos menospreciando a las personas, por como son, de donde son, que rezan, que aspecto tienen, que ideología promulgan o cuantos bienes absurdos poseen y la falta de ética con respecto a la naturaleza, los animales y seres vivos que estamos exterminando, como si fuese un derecho el matar y maltratar, para disfrutar de comodidad o por negocios.

Mientas, aquí, en esta tierra, pues para mi no es mi país, sí, la tierra que amo y que me vio crecer, solo los apegados al patriotismo, son los que no ven. La tierra, no esta nunca por encima del conjunto humano y que un hermano que vive en tierras del norte o del sur, nunca puede ser menos que un puñado de tierra, al amor y el respeto entre las personas es el aspecto fundamental para poder crear una sociedad, justa, equilibrada, sin rencores, sin con rencillas pero que pasarán con el tiempo, si todos nos echamos una mano entre todos, si logramos, ser un todo, una sociedad que no esté clasificada en, blancos o negros, ricos o pobres, lentos o rápidos, listos o tontos, bellos o feos; sino en personas "libres", pues eso es una utopía en esta sociedad actual; llenas de amor, de libre elección sexual y de respeto por cualquier tipo de vida, por todos sus semejantes, de equilibrio social, donde cuando las personas sufriesen o tuviesen problemas, lo que hubiese que controlar, fuesen las avalanchas de ayuda y de apoyo; mientras aquí y todo el mundo sigue gastando y despilfarrando en gasto militar, tanto que, si se cancelasen todos los presupuestos en defensa, se podría librar al mundo de la crisis y a todos los países de la falta de recursos y de la hambruna.
En vez de eso, hoy en el siglo XXI, la gran época de la tecnología y los múltiples avances, avances en qué, en las mentalidades, no se han movido ni un ápice. Hoy y ayer cuando nos sobraba el dinero también, continúan muriendo millones de personas, por no disponer de un simple trozo de pan o un vaso de agua y eso, si este mundo tuviese un poco menos de egoísmo y más de conciencia y decencia humana, ahí si, se tendría que levantar en gigantescas manifestaciones y revueltas pacíficas, no solo de mil personas, sino países enteros.
Como escuché ayer, como puede ser que las calles de este país y las de todos, se llenen de protestas, porque a un funcionario o a un sector laboral, les recorten un trienio de su sueldo y algún que otro derecho y que sólo nos indigne, durante un instante, cuando salen imágenes de niños, seres humanos como tú y yo, en el cuerno de África, muertos antes de que aprendiesen a decir "mami, te quiero", enterrados por ellas entre sus brazos y hagamos un simple comentario, mientras seguimos mordisqueando las chuletas de la cena, como si tal cosa.
Todo esto, viene al caso de que, esta sociedad, no este país, sino la sociedad que vive aquí, en estas tierras, es una sociedad, completamente absorbida, por la falta de respeto por los demás, el egoísmo exacerbado, los prejuicios, las falsas apariencias; donde muy pocos se lamentan a lo lejos, casi sin voz, personas o asociaciones, a la que no se les presta la mínima atención, se les deja existir, para cumplir con las voces discordantes, pero luego, su capacidad para poder cambiar realmente asuntos de gran calado, es nula; siguen siendo voces en la lejanía, que se pisotean por el continuo bombardeo, de supuestas noticias y avisos muchos más importantes, pero solo para nosotros mismos, solo problemas que nos incumben a nosotros.
Mientras la mentalidad, sea de esa forma, nunca cambiara nada, mientras sea primero lo mio, luego lo mío y después ya veré si puedo mirar lo de los demás, no habrá nada que hacer. Pues, como ya he dicho, todos somos uno y como tal deben de buscarse las soluciones; soluciones, no leyes, prohibiciones o decretos, que lo único que consiguen, es recortar la libertad individual y ampliar las arcas del estado con las sanciones.

Como si, en caso que este mundo se fuese a pique, nosotros pudiésemos seguir adelante, como hemos podido salir de esta, ya nada nos afecta, cuando cada día se dan más y más ejemplos, que lo que suceda en Shangai, Tierra de fuego o en Alaska, a la larga o a la corta dependiendo de la trascendencia económica, no social, que tenga, nos afectarán a todos, pues todo ya esta basado así, este sistema depende de un todo, un todo financiero, un todo sin escrúpulos, donde el gran todo, que es la sociedad, las personas asalariadas, son solo para ellos, su banco central de beneficios, donde exprimir y exprimir, para cumplir sus exigencias, a nivel individual por países, exigencias, sin otro fin que aumentas sus ingresos, sin entrar a valorar el coste humano.

Por eso, todos tenemos que unirnos, mostrar nuestra alta indignación, por el alto nivel de desprecio y manipulación, que las altas esferas, poderes financieros, políticos y organizaciones mundiales, hacen sobre el auténtico poder de este mundo, la sociedad reflexiva, que formando un todo, quiere una vida digna, con valores, respeto por todo y tod@s, igualitaria en derechos y deberes, pero también en recursos y posibilidades de salir adelante, pero no solo aquí, sino a nivel global.

Evidentemente, todo esto puede sonar a una utopía irrealizable, pero la realidad es, que esa mentalidad del para que molestarse, es la que nos lleva a este estado de conformismo, egoísmo, desprecio, ceguera e inhumanidad actual.

Solo quiero expresar mi malestar, por como se compartan las personas y las sociedades actuales, esta pensamiento indignado, espero, al menos, haya podido servir, para crear en ti, aunque haya sido por un instante, una duda, un ápice de cabreo o de indignación.

En definitiva, que esta sociedad, es un chiste de mal gusto, llena de feriantes, que manipulan a sus marionetas de cartón, maltratadas, carentes de alma e impasibles.